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No estás loca, estás siendo excluida:

Cuando el racismo y el clasismo se disfrazan de convivencia familiar

A veces, la violencia no grita. Solo se disfraza de bromas, silencios o exclusiones.

Una joven mexicana, casada con un argentino, compartió en su cuenta de TikTok (@tri_pa1) cómo fue discriminada por la familia de su esposo: la ignoraban, la dejaban fuera de las salidas y la trataban como si no perteneciera. La escena parece doméstica, pero es profundamente violenta.

Este caso se volvió viral no solo por la crudeza emocional, sino porque tocó fibras comunes: ¿cuántas veces hemos normalizado comentarios racistas, clasistas o humillantes “en familia”?
La salud mental también se defiende en casa.

El racismo doméstico: la herida que no se ve

El racismo no siempre se expresa en insultos. A veces se esconde en gestos, exclusiones o en el simple “no te tomamos en cuenta”.
Este tipo de violencia psicológica tiene efectos devastadores:

  • Daña la autoestima.

  • Despierta ansiedad y sensación de no pertenecer.

  • Transmite inseguridad a lxs hijxs (“¿mi mamá no merece respeto?”).

Cuando el hogar se convierte en un espacio donde tienes que justificar tu origen o tu acento, tu salud emocional se erosiona poco a poco.

⚠️ Microviolencias cotidianas (que no son “pequeñas”)

  • Que te avisen a última hora para no incluirte realmente.

  • Que te asignen tareas domésticas por ser mujer o “la mexicana”.

  • Que invaliden tus emociones con frases como “no exageres” o “así somos”.

  • Que tu pareja guarde silencio ante la discriminación y falta de consideración hacia tu persona.

Estos actos son microagresiones que, sumadas, se convierten en violencia psicológica estructural.

🧠 Impacto en la salud mental y la crianza

Vivir en un ambiente así no solo te afecta a ti:

  • Genera culpa y aislamiento.
  • Refuerza patrones de sumisión.
  • Puede influir en la crianza: lxs hijxs aprenden que callar es sobrevivir.

Como señala la psicóloga mexicana Rocío López, “poner límites no destruye vínculos, los redefine con respeto y dignidad”.

❤️‍🩹 Cómo sanar y poner límites desde la conciencia

  1. Valida lo que sientes. No necesitas una prueba para reconocer el maltrato.

  2. Habla con tu pareja: el silencio también es complicidad.

  3. Busca acompañamiento psicológico. Es más fácil sanar si alguien te escucha sin juzgarte.

  4. Crea una red de apoyo. Familia elegida, amistades, comunidad.

 🚨 Recuerda: no tienes que adaptarte al maltrato para ser amada.

✨ “Tu paz también es herencia”

Protegerte no es egoísmo, es amor propio.
Tu hija o hijo verá cómo eliges tu dignidad antes que la costumbre.
Defender tus límites es una forma de sanar generaciones completas.

👉 En Mind it! creemos que cuidar tu salud mental también es aprender a decir “no más”.

Referencias

  • TikTok: testimonio viral sobre discriminación familiar (2025).
  • TikTok: @tri_pa1
  • López, R. (2024). Límites sanos, relaciones conscientes. Editorial Herder.
  • INMUJERES (2023). Violencia psicológica y discriminación estructural en el hogar.